2 Timoteo 1:7 “Porque no nos ha dado Dios espíritu de cobardía, sino de poder, de amor y de dominio propio”.
La cobardía es el miedo o falta de valor para enfrentar situaciones de riesgo o peligro. Quién en esta vida no ha tenido que enfrentarse a esas situaciones? Más bien la pregunta adecuada sería cómo enfrentamos nuestros riesgos?
El apóstol Pablo había dejado a su joven discípulo Timoteo como encargado de la iglesia de Éfeso y al parecer empezaba a enfrentar problemas con falsos maestros que atentaban contra la doctrina que el apóstol Pablo había sembrado en la iglesia. Pablo instruye a Timoteo sobre la manera más eficaz para lidiar con las circunstancias que le rodean y lo primero que le aconseja es que “avives el fuego del don de Dios que está en ti” , no se refiere a que avive su fe puesto que en el v 5 de este mismo capítulo Pablo elogia la fe de Timoteo; se refiere más bien a que avive el don del Espíritu que hay en él. Quizás la mucha tensión había ocasionado en Timoteo una pérdida del poder y presencia del Espíritu Santo.
Lo mismo que ocurre en nosotros, que hemos sido sellados con el Espíritu Santo desde que creímos pero nuestros pecados y las muchas entretenciones en la vida mundana impiden que su presencia se manifieste con poder en nosotros. Es por esto que el consejo de Pablo es válido para la iglesia de hoy también.
Dios no nos ha dado un espíritu de temor y cobardía; al contrario nos ha dado poder, amor y dominio propio, cualidades que forman parte del fruto del Espíritu Santo. Gálatas 5:22-23. “Más el fruto del Espíritu es amor, gozo, paz, paciencia, bondad,fe, mansedumbre ,templanza;contra tales cosas no hay ley”.
Si estamos teniendo demasiados miedos frente a nuestros problemas es hora de avivar el Espíritu de Dios en nosotros; necesitamos buscar a Dios a través de la oración y de la lectura de su palabra, es lo único que nos dará la paz,el poder, la sabiduría, la fuerza, y el valor para enfrentarlos. Dios te bendiga.
Amen Dios los bendiga pastores 🙏🙏🙏